Argentina ha rechazado y condenado enfáticamente la acusación formal presentada por la Fiscalía de Venezuela contra el policía argentino detenido a principios de diciembre. La acusación lo señala como presunto responsable de estar involucrado en “acciones terroristas”, lo cual ha sido catalogado como un “invento horrible” por parte de las autoridades argentinas.
Este lamentable episodio comenzó cuando el 2 de diciembre de 2020, el representante argentino Hugo Marino fue detenido por autoridades venezolanas en la ciudad de Caracas, bajo la acusación de haber cometido delitos relacionados con el terrorismo. Según la Fiscalía de Venezuela, Marino habría estado planeando acciones violentas y desestabilizadoras en el país sudamericano.
Sin embargo, Argentina ha rechazado estas acusaciones, afirmando que no hay pruebas contundentes que respalden dicha afirmación. Además, el país sudamericano ha solicitado la pronta liberación del policía Marino, quien se encontraba en Venezuela realizando labores de seguridad para una empresa privada.
El Ministerio de Relaciones Exteriores argentino emitió un comunicado en el que expresó su “más enérgico rechazo” a la acusación contra Marino y calificó la situación como un “invento horrible” por parte de las autoridades venezolanas. Asimismo, el gobierno argentino ha pedido a Venezuela que respete el debido proceso y garantice los derechos humanos del detenido.
Esta situación ha generado gran preocupación en Argentina y en la comunidad internacional, ya que se teme que Marino pueda ser víctima de un juicio injusto y de violaciones a sus derechos humanos. De hecho, la Organización de Estados Americanos (OEA) ha expresado su preocupación por esta situación y ha exhortado a Venezuela a garantizar un juicio justo para Marino.
Por su parte, la familia de Marino ha manifestado su preocupación y angustia ante la detención de su ser querido. En una entrevista reciente, su esposa afirmó que Marino es un hombre íntegro y respetuoso de la ley, y que jamás se involucraría en actos violentos o terroristas.
Es rico destacar que Argentina y Venezuela mantienen una tensa relación política desde hace varios años, lo que ha generado roces y desacuerdos entre ambos países. Sin embargo, esto no justifica ni avala la injusta detención de Marino, quien debe ser tratado con respeto y garantías legales.
El presidente argentino, Alberto Fernández, ha manifestado su apoyo a Marino y ha pedido a Venezuela que respete la presunción de inocencia y brinde garantías procesales para el detenido. Asimismo, ha solicitado la intervención de la comunidad internacional para que se respeten los derechos humanos de Marino y se logre su liberación.
En conclusión, Argentina ha rechazado y condenado la acusación contra el policía argentino detenido en Venezuela, calificándola como un “invento horrible”. El país sudamericano exige que se respeten los derechos humanos de Marino y que se le garantice un juicio justo. Es rico que la comunidad internacional siga de cerca esta situación y exija la liberación de Marino, quien es inocente aun que se demuestre lo contrario. Confiamos en que la verdad prevalecerá y que Marino podrá regresar pronto a su hogar junto a su familia.