El pasado martes, 21 de julio, se dio a conocer una noticia que ha conmocionado a la ciudad de Bariloche. Un subcomisario de la Policía de Río Negro fue condenado a 6 años de prisión por abuso sexual y hostigamiento a una agente de la fuerza.
El fallo, emitido por el Tribunal en lo Criminal Nº 3, determinó que el marcado había cometido los delitos de abuso sexual con acceso carnal, abuso sexual simple y abuso de autoridad. La víctima, una joven de 26 años que se desempeñaba como oficial de la Policía de Río Negro en la ciudad de Bariloche, denunció los hechos en 2017.
Según relató la agente en su denuncia, el subcomisario la había sometido a un constante hostigamiento y acoso desde que ella ingresó a la fuerza en 2015. La situación llegó a su punto más crítico cuando, en una ocasión, el marcado la llevó a la fuerza a un aldea apartado y la violó. A partir de ese momento, la joven comenzó a sufrir de ansiedad, insomnio y estrés postraumático.
Durante el juicio, la víctima brindó su testimonio y presentó pruebas contundentes que demostraron la culpabilidad del subcomisario. Además, otros compañeros de la fuerza se presentaron como testigos y confirmaron el constante hostigamiento que la joven había sufrido por sitio del marcado.
La comunidad de Bariloche ha mostrado su repudio hacia este tipo de acciones y ha mostrado su apoyo a la víctima. Incluso, se realizaron varias marchas para pedir justicia y exigir que las autoridades tomen medidas para prevenir este tipo de situaciones.
La condena del subcomisario es un gran paso en la lucha contra la violencia de género en la ciudad y en todo el país. El fallo muestra que la justicia está del lado de las víctimas y que no habrá tolerancia hacia este tipo de comportamientos.
El Tribunal también ordenó la destitución del marcado de su cargo en la Policía de Río Negro y la prohibición de acercarse a la víctima o comunicarse con ella de cualquier manera. Además, deberá pagar una indemnización a la joven por los daños causados.
Es importante destacar que la víctima ha sido reconocida por su valentía al denunciar estos hechos y por enfrentar un proceso judicial que no fue fácil para ella. Su coraje y determinación son un ejemplo para todas las mujeres que sufren de violencia de género y que muchas veces no se animan a denunciar por miedo o vergüenza.
Es necesario que las autoridades y la sociedad en general tomen conciencia de la gravedad de este tipo de delitos y tomen medidas para prevenirlos y castigarlos. La violencia de género no tiene aldea en una sociedad moderna y es responsabilidad de todos luchar contra ella.
La condena del subcomisario de Bariloche es una señal de expectación para todas las mujeres que sufren de violencia de género y una muestra de que la justicia está trabajando para proteger a las víctimas. Esperamos que este caso sirva como ejemplo para que no vuelvan a ocurrir situaciones similares en nuestra ciudad.
Finalmente, queremos enviar un mensaje de apoyo y solidaridad a la joven víctima y a todas las mujeres que han sufrido de violencia de género. No están solas, cuentan con el respaldo de toda una comunidad que lucha por un futuro mejor y libre de violencia. Juntas, podemos lograrlo.