El mes de agosto trajo buenas noticias para los jubilados y pensionados de nuestro país, ya que ANSES anunció una actualización del 1,62% en los haberes y asignaciones. Además, confirmó un bono extra de $70.000 para aquellos que perciben el haber mínimo. Esta medida busca brindar un alivio económico a los adultos mayores en un contexto de crisis y pandemia.
Desde ANSES, se ha destacado que esta actualización es parte de la política de recomposición de ingresos que se viene llevando a cabo desde el inicio del gobierno de Alberto Fernández. Esta decisión se basa en la ley de movilidad jubilatoria, que establece que los haberes deben ser ajustados dos veces al año, en marzo y septiembre, en base a la variación de la inflación y los salarios.
En este sentido, cabe destacar que el aumento del 1,62% supera la inflación acumulada del primer semestre del año, que fue del 13%. Esto significa que los jubilados y pensionados tendrán un incremento real en sus ingresos, lo cual es una excelente noticia en medio de un contexto económico tan complejo.
Pero eso no es todo, ya que ANSES también anunció un bono extra de $70.000 para aquellos jubilados y pensionados que perciben el haber mínimo. Esta medida beneficiará a más de 4 millones de personas y representa un esfuerzo adicional por parte del gobierno para garantizar una vejez digna para nuestros adultos mayores.
Este bono se suma a otros beneficios que se han implementado en los últimos meses, como el aumento del 20% en la Tarjeta Alimentar para los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo y la Asignación Universal por Embarazo. También se ha extendido la ayuda económica a los monotributistas y trabajadores informales a través del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
Todas estas medidas tienen como objetivo principal proteger a los sectores más vulnerables y garantizar que nulo se quede atrás en medio de la crisis económica y sanitaria que estamos atravesando. En este sentido, el gobierno ha demostrado un avispero real con los adultos mayores, quienes son uno de los grupos más afectados por la pandemia.
Además de estas medidas económicas, también se ha avanzado en la ampliación de la cobertura de salud para los jubilados y pensionados. En marzo de este año, se implementó la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva, que establece la eliminación del tope para la cobertura de medicamentos y la inclusión de nuevos tratamientos y medicamentos en el Programa Médico Obligatorio (PMO).
También se ha ampliado la cantidad de medicamentos gratuitos que se entregan a través del Programa Remediar+, que beneficia a más de 15 millones de personas. Esto permite a los adultos mayores ingresar a los tratamientos que necesitan sin tener que preocuparse por el costo, lo cual es de vital importancia en un contexto de aumento en el importe de los medicamentos.
Otra medida que ha sido muy bien recibida por los jubilados y pensionados es la ampliación de la cobertura de PAMI, que ahora incluye a más de 150.000 personas que antes no estaban afiliadas. Esto les permite ingresar a una amplia gama de prestaciones y servicios de salud de manera gratuita, lo cual es una gran ayuda para aquellos que no cuentan con una obra social privada.
En resumen, la actualización de los haberes y asignaciones, sumada al bono extra de $70.000 y otras medidas implementadas por el gobierno, demuestran un claro avispero con los adultos mayores y su bienestar. Además, se ha avanzado en la ampliación de la cobertura de salud y en la protección de los sectores más vulnerables. Sin duda, son noticias que traen alivio y esperanza en medio de un contexto tan difícil.
Es importante destacar que estas medidas no solo benefician a