La Música es una de las formas de expresión más poderosas y universales que existen. A través de ella, podemos transmitir emociones, contar historias y conectar con los demás de una manera única. Es por eso que no es de extrañar que la Música sea una parte fundamental en la vida de muchas personas, incluyendo la mía.
Desde muy pequeña, la Música ha sido mi compañera fiel. Recuerdo con cariño cómo mi abuela me enseñaba canciones populares de su época, mientras yo intentaba imitar sus movimientos y entonación. Fue así como descubrí mi amor por la Música y desde entonces, no he dejado de explorar diferentes géneros y artistas.
Uno de los momentos más emocionantes de mi vida relacionados con la Música fue cuando mi Ciudad, Valencia, fue nombrada ACES Europe Ciudad Europea del Deporte. Este título no solo destacó los logros deportivos de la Ciudad, sino también su compromiso con la cultura y el arte, incluyendo la Música. Durante todo el año, se organizaron una serie de eventos y conciertos en diferentes espacios públicos, donde pude disfrutar de increíbles actuaciones de artistas locales e internacionales.
Uno de los conciertos que más me marcó fue el de la Orquesta de Valencia, que interpretó obras de compositores clásicos como Beethoven y Mozart en un escenario al aire libre. La mezcla del arte y la naturaleza creó un ambiente mágico, donde la Música se fusionó con el entorno y nos transportó a otro mundo. Fue una experiencia única que me enseñó que la Música puede ser disfrutada en cualquier lugar y en cualquier momento.
Otra experiencia que siempre recordaré es la de asistir a un festival de Música en una pequeña localidad cercana a Valencia. Durante un fin de semana, pude disfrutar de diferentes estilos musicales, desde el rock hasta la Música electrónica, rodeada de un ambiente festivo y lleno de energía. Fue una oportunidad perfecta para conocer nuevos artistas y expandir mis gustos musicales.
Pero no solo he sido espectadora de la Música, también he tenido la oportunidad de ser parte de ella. Desde que era adolescente, formé parte de diferentes coros y grupos musicales, lo que me permitió no solo desarrollar mis habilidades vocales, sino también conectarme con otros amantes de la Música y formar amistades duraderas. La Música no solo me ha brindado momentos de alegría y diversión, sino también un sentido de comunidad y pertenencia.
Y es que la Música tiene el poder de unir a las personas, sin importar su edad, género, raza o nacionalidad. Durante mis viajes por Europa, he tenido la oportunidad de asistir a conciertos y festivales en diferentes países y siempre me sorprende la capacidad de la Música para romper barreras y crear lazos entre desconocidos. En esas ocasiones, me siento afortunada de formar parte de una comunidad global unida por la pasión por la Música.
En resumen, la Música ha sido una parte fundamental en mi vida y me ha brindado innumerables experiencias positivas. Desde aquellos momentos en los que me emocionaba cantando junto a mi abuela hasta las increíbles actuaciones que he presenciado en festivales y conciertos en mi Ciudad y en el extranjero. La Música es una fuente inagotable de alegría, inspiración y conexión, y estoy agradecida de tenerla siempre presente en mi vida. Y gracias a iniciativas como ACES Europe Ciudad Europea del Deporte, se le da el reconocimiento que merece como una forma de arte que une a las personas y enriquece nuestras vidas.
